Siento decirte que...

Tengo un amigo que… casi siempre que se usa esta entrada y se cuenta algún problema todo el mundo interpreta que te ha sucedido a ti, por el contrario si comienzas con un Una vez me pasó que... si es una movida buena nadie te cree. ¡Que putada! (o ¡Que curioso!, que tampoco es para tanto).

Cambiando los factores se altera el producto o, lo que es lo mismo, la ley conmutativa con emulsión de distributiva se va de colorines.

Si empiezas con Tengo un amigo que… y cuentas una buena aventura es seguro al casi 100% que todo el mundo asimile dos conceptos: (1) Sucedió de verdad y (2) No te sucedió a ti, pero si a un amigo, incluso a un amigo de un amigo de un infinito recursivo, pero nunca a ti.

También, en el lado opuesto, si comienzas con Una vez me pasó que... y es un problema, siguiendo el razonamiento anterior, casi nadie te cree. ¡Pues no!, casi todo el mundo se lo cree. Las interpretaciones dependen más de lo que los otros quieran ver que de lo que tu quieras mostrar. Hay/Ay/Ahí gente para todo. No tiene que ver con la verdad objetiva, tiene que ver con cada verdad individual. Absurdo de necesidad sometido al puto ego.

Otro gran inicio, por las excesivas veces usado, es Érase una vez... Esto directamente suena a rollo eterno como eufemismo de post de Duczen siendo coeducado.

Al margen de esto,
si escribo mi nombre en el word,
él lo cambia a duchen.

¿Qué querrá decir?
Ufffff ufffff … estoy mareado …
y ¿esas ronchas negras de mis brazos? … Ummm ...
no, en serio,
yo me duczo (entre s y /s, mayores y menores que) ducho.

Un primo hermano del anterior inicio es el Había una vez..., pero con este uno empieza a pensar en Don Pepito, Don Manuel, familias de ...itos varios, Torrebrunos y elefantes con incontinencia suma.

Nota mental dos puntos
tengo que escribir un libro.

A topicazo limpio se llega a En un país muy lejano... ¿lejano?, ¿que país?, seguro que no está en este planeta a tiro de low cost, dicho en perfecto rp. Un país que resulta ser el mismo de uno mismo, siempre y cuando que el mismo sea el mismo en el que uno mismo cree estar. El clásico por excelencia para hablar de tu casa en su versión sublimemente idealizada.

Siendo poco originales, se puede recurrir a En un lugar de la..., pero este ya es más propio para acabar.

FIN.

Uyyyy, me noto en modo humor suave, Ainssss.

La idea del post de hoy era hablar del último disco de Deluxe llamado Fin de un viaje infinito. Es el proyecto de Xoel Lopez, un gallego cuya música me llama mucho la atención y me deja indiferente a partes iguales, dependiendo del tema, del día que me toque y mi estado anímico. Más bien es que cuando estoy de buen humor coincido con sus canciones lentas, densas, dramáticas, existenciales o cargantes; y cuando estoy en modo autodescenso me cruzo con las enérgicas, vitales, optimistas o tarareables; que de todo tienen estos tipos. Eso sí, las que me gustan lo hacen con todo el pack (letra, música, sonido, ...).

El caso es que en una primera escucha me aburrió un poquito el disco, pero ayer con el diario pop de radio3 (que no suelo escuchar) de fondo mientras trabajaba en modo zero japones, le di otra oportunidad y poco a poco voy descubriendolo. La verdad es que la primera vez que oí a Deluxe pasé bastante de ellos, pero algo me decía que podía ser interesante, al final le pille el punto, sobre todo después de escuchar Cientos de mentiras. Hasta ese disco, Los jóvenes mueren antes de tiempo, no les hice ni puto caso. Culturalmente tengo mucha autodisciplina aplicada a la curiosidad, por lo que les descubrí a lo retronostalgia.

Anyway, me reafirmo en que hay días que me vuelven loco y otros que también, pero con conceptos antagonistas, palabra que no es esdrújula. Esto no es como lo de Marisol y Keane, que ni uno ni otro, es una puerta galáctica a Deluxe.

No me apetece poner el nuevo single, se llama Colillas en el suelo, Que No.

En principio quería hablar de Deluxe de forma breve y al final no he hecho ni una cosa ni la otra, bueno lo de breve sí o ¿es lo otro?.

¿Qué habré aprendido a hacer hoy?