Gol, el As de oros

El fin de semana deportivo, marcado por el temporal de nieve y lluvia que azotó nuestros campos, no ha sido prolífico en grandes sorpresas pero si en grandes espectáculos.

La jornada extraordinariamente, debido al inminente congreso internacional que tendrá lugar en Cancún, comenzó el sábado por la mañana.

El encuentro adelantado fue condicionado por el lamentable estado de césped, césped cubierto por una capa de hielo que en algún momento hizo peligrar la disputa del mismo y en el cual más habría valido usar crampones en vez del calzado reglamentario. A pesar de la fuerte ventisca que se desató al final, el equipo visitante consiguió llevarse la victoria no sin antes sufrir hasta el punto de tener que arrastrarse literalmente por el área rival.

Dentro del horario habitual destaca el partido que reunió a tres de los aspirantes al título. Fue un encuentro disputado hasta el final. El juego más propio de un partido de futbolín, lineal y supeditado a la casualidad, no destacó por su calidad técnica si exceptuamos a uno o dos jugadores. Al final la suerte premió a quienes más confiaron en sus posibilidades. Partido que se recordará por el buen entendimiento entre todas las aficiones.

La jornada dominical nos deparó la confirmación del equipo revelación como tal, el Patetic Team ( © & ™ Equipo Patético) como cariñosamente es designado por algún que otro señorito de esos que pueblan el universo futbolístico.
Ante un clima lluvioso y un terreno de juego más propio de un entrenamiento militar, los jugadores se entregaron a un juego práctico lleno de sufrimientos, incluso descolgándose algún jugador, otros caminando sobre elevados puentes movedizos o por las ramas como en una tirolina circense. El esfuerzo, al límite, tubo a los jugadores contra las cuerdas causando alguna baja, afortunadamente nada grave, pero dando sus frutos sobre el pitido final, no sin antes sufrir el siempre reprochable lanzamiento de objetos sobre el campo de juego.

En resumen, magnífica jornada deportiva digna de un buen chuletón y un buen vino.

Yo Soy Keyser Soze, reportero deportivo porque a veces la ciencia es ciencia ficción.